Michel Zelada
Los Tiempos (25/06/09).- Con la paz del señor, guardados el cáliz, el vino y el sacerdote… empezó el bullicio en el altar del Cristo sufriente.
23 niños y adolescentes con sus violines, violas y violonchelos a cuestas acomodaron sus sillas, atriles y partituras. El silencio sepulcral que emana de las altas bóvedas de la iglesia del Hospicio cedió a una dulce melodía: “Gloria”, de Antonio Vivaldi, invadió el templo.
Unas manos todavía tímidas empuñaron los arcos y empezaron el movimiento armónico sobre las cuerdas, los concertistas tenían la mirada repartida entre la partitura y la batuta del director, Abraham Bellota.
Y es que los integrantes de la Orquesta Infantil Cochabamba deleitaron anoche a los visitantes del templo Hospicio. Los pequeños artistas interpretaron un variado programa musical que empezó con los barrocos, para luego, enlazar una segunda parte con ritmos infantiles o bandas sonoras de películas de Disney como la inolvidable “Pocahontas” para terminar con un conjunto de piezas de Grieg.
La timidez inicial fue cediendo a la confianza, seguridad, destreza y al talento de los concertistas, al finalizar el recital la satisfacción de los intérpretes se complementó con los gestos de orgullo de los padres cuyos hijos inician una carrera musical y artística.
De esa manera celebra la Fundación Sinfónica Cochabamba su cuarto aniversario, con un ciclo de conciertos a cargo de sus integrantes.
Las actividades continúan hoy con el recital en el templo Don Bosco (Villa México de la zona sur) a las 19:30, con los tres grupos de la Fundación. La interpretación de hoy promete ser inolvidable.
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